"DIOS, DIOS MÍO ERES TU; DE MADRUGADA TE BUSCARE; MI ALMA TIENE SED DE TI, MI CARNE TE ANHELA, EN TIERRA SECA Y ÁRIDA DONDE NO HAY AGUAS, PARA VER TU PODER Y TU GLORIA, ASÍ COMO TE HE MIRADO EN EL SANTUARIO", Salmos 63: 1-2.
Gracias Dios mío por tu palabra, bendice a todo aquel que la este leyendo, en el nombre de Jesús. Amén.
Dios pasó a su pueblo Israel por el desierto y ellos vieron la misma gloria de Dios, al extremo de ver el Mar Rojo abrirse en dos para ellos pasar en seco.
Hoy Dios quiere hacer el milagro en nuestras vidas y no logramos ver su Gloria porque nuestra Fe no alcanza la plenitud que Cristo quiere de ti y de mi.
Hoy nos rodean
"PRUEBAS Y MÁS PRUEBAS"
No importa por lo que estemos pasando, Dios quiere abrir el Mar Rojo de nuestro transcurrir.
El Salmista nos da la clave: "DIOS, DIOS MÍO ERES TU; DE MADRUGADA TE BUSCARE; MI ALMA TIENE SED DE TI, MI CARNE TE ANHELA, EN TIERRA SECA Y ÁRIDA DONDE NO HAY AGUAS. PARA VER TU PODER Y TU GLORIA, ASÍ COMO TE HE MIRADO EN EL SANTUARIO", Salmos 63: 1-2.
Vamos a buscar el rostro de Jesús, y si estas pasando por un desierto de dificultades y problemas, sólo cree, y Dios hará el milagro, humillandonos en oración y suplica.
Búscalo de madrugada.
Es tiempo de adoptar la voluntad de Dios.
Sólo así podremos ver su poder y su gloria.
Dios te guarde,
Hector Paula
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