LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Isaías 54: 17, “NINGUNA
ARMA FORJADA CONTRA TI PROSPERARÁ, Y CONDENARÁS TODA LENGUA QUE SE LEVANTE
CONTRA TI EN JUICIO. ESTA ES LA HERENCIA DE LOS SIERVOS DE JEHOVÁ, Y SU
SALVACIÓN DE MÍ VENDRÁ, DIJO JEHOVÁ”
Gracias Dios mío por tu Palabra.
Te presento los lectores y lectoras, bendícelos de una manera especial, mira
sus niños, mira sus familias, ten misericordia, protégelos en alas de tu Santo
Espíritu, danos sabiduría de lo alto y ayúdanos a perseverar hasta el fin, en
el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE:
El peligro siempre nos acecha,
existen numerosas formas de ser agredidos, tanto material, cómo espiritualmente.
Incluso un pequeño detalle nos puede
afectar, además de que en nuestros entornos familiares, de amistad, de trabajo,
de relaciones con los demás, podemos encontrar algún tipo de agresión ó
persecución.
Vivimos en un mundo que en el momento
menos esperado, nos llega la adversidad, y ni que decir en el evangelio, la
guerra espiritual es implacable.
La guerra espiritual se mueve en
regiones celestes de maldad, compuestas por principados, gobernadores de las
tinieblas, potestades y todo un ejército de demonios, pero la buena noticia es
que en Cristo somos más que vencedores, esa es la gran promesa.
Jesús nos otorga escudos de fe que
nos hacen
“A PRUEBA DE TODO”
Es así como la Sangre de Cristo nos
cubre y nos protege, por lo cual Dios nos vive recordando el sacrificio de
Jesús en la cruz del Calvario, para que esa Sangre Preciosa e Inmaculada también
te proteja.
A veces pensamos que todo está
perdido y las fuerzas casi se nos van, porque recibimos algún tipo de
persecución, y es en esas circunstancias que Dios interviene, para que ninguna
arma que se forje contra ti pueda prosperar.
Dios no lo va a permitir, “NINGUNA
ARMA FORJADA CONTRA TI PROSPERARÁ, Y CONDENARÁS TODA LENGUA QUE SE LEVANTE
CONTRA TI EN JUICIO. ESTA ES LA HERENCIA DE LOS SIERVOS DE JEHOVÁ, Y SU
SALVACIÓN DE MÍ VENDRÁ, DIJO JEHOVÁ”, Isaías 54: 17.
La lucha es fuerte, los problemas son
acuciantes, pero todo obedece a un proceso, y es lo que debes de tener
presente, por más grande que sea tu circunstancia, es un momento de clamar con
fe sobre natural.
Tenemos hermosas promesas, la fe es
la llave que va a abrir las puertas de esas promesas que Dios tiene para ti dentro
de ese problema, sólo cree.
Si no conoces a Jesús, es una ocasión
preciosa para postrarte ante sus pies, ven a Él !!!
Dios
te bendiga !!!
Héctor
Paula.
Para la Gloria de
Dios
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