“AMIGO PARA SIEMPRE”

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

Mateo 28: 20, “ENSEÑÁNDOLES QUE GUARDEN TODAS LAS COSAS QUE OS HE MANDADO; Y HE AQUÍ YO ESTOY CON VOSOTROS TODOS LOS DÍAS, HASTA EL FIN DEL MUNDO. AMÉN”

Gracias Dios mío por tu Palabra. Gracias por las pruebas, gracias por las bendiciones, te alabamos en la escasez y te alabamos en la abundancia, eres digno de toda adoración, porque tuyo es el imperio, la gloria y la majestad por los siglos, recibe toda nuestra alabanza, bendice los lectores y lectoras en el nombre de Jesús. Amén.

 MENSAJE:

Nosotros todos hemos tenido amigos y amigas que han sido grandes amigos, desde mi infancia recuerdo a Guillermito Guzmán y Tavaré Mundaray, eran mis amigos en Villa Duarte. En Puerto Plata recuerdo a Luis José, Francisquito y Mariano Hernández. En Azua recuerdo a Junior Perez.

En Santiago recuerdo a José Andrés Peralta y Pablito Pichardo. En San Cristóbal recuerdo a Alexander Martínez, el Mello, en Baní recuerdo a Joaquín Pimentel, en Puerto Rico a Manuel Rosado y Rosa Ubiera, esos han sido mis mejores amigos en esos lugares que he vivido.

Sé que usted puede hacer su lista, no es difícil, puedo decir que esos han sido amigos incondicionales, como hermanos.

Obviamente la amistad en términos humanos tiene sus límites, pues los humanos somos limitados a un espacio de tiempo en nuestro paso por esta tierra, y Dios quiere mostrarnos un

“AMIGO PARA SIEMPRE”

Su nombre es Jesús de Nazaret, el que nos ha dado vida a través de su Sangre Preciosa y nos ha dado la gran enseñanza de que guardemos todas las cosas que Él nos ha mandado.

Y nos ha prometido estar a nuestro lado todos los días hasta el fin del mundo, eso no es cualquier cosa.

Jesús nos dice que va a estar con nosotros por toda la eternidad, hasta que llegue el fin de los tiempos, “ENSEÑÁNDOLES QUE GUARDEN TODAS LAS COSAS QUE OS HE MANDADO; Y HE AQUÍ YO ESTOY CON VOSOTROS TODOS LOS DÍAS, HASTA EL FIN DEL MUNDO. AMÉN”,  Mateo 28: 20.

Aleluyahhhh  !!!

Ese es el Jesús que te presento en esta hora, si es que no lo conoces, Él murió por ti y por mí, no sin antes haber sido azotado, humillado y crucificado, y ese sacrificio con derramamiento de Sangre fue el precio que Jesús pagó por tí y por mí, eso merece un amén.

Si no conoces a Jesús, es el día propicio para venir a sus pies, ven a Él  !!!    

Dios te bendiga !!!

Héctor Paula.

Para la Gloria de Dios