viernes, 20 de septiembre de 2019

“LO DIFÍCIL TRANSFORMADO”



LECTURA BÍBLICA DE HOY:

Jeremías 32: 17, “!OH SEÑOR JEHOVÁ! HE AQUÍ QUE TÚ HICISTE EL CIELO Y LA TIERRA CON TU GRAN PODER, Y CON TU BRAZO EXTENDIDO, NI HAY NADA QUE SEA DIFÍCIL PARA TÍ”

Gracias Dios mío por tu Palabra. Te presento los lectores y lectoras, glorifícate en cada uno de ellos y ellas, ten misericordia, abre puertas de bendición, suple sus necesidades perentorias, no permitas que ninguno se pierda, obra milagros en sus vidas, toma dominio y control de cada uno de ellos, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE:

Cada vez que vamos a realizar una actividad, se nos presentan dificultades propias de lo que vamos a hacer.

Si usted ejerce algún trabajo, esa dificultad que encuentra, hará el trabajo más difícil. Pero así mismo en nuestro diario vivir vemos las cosas difíciles y a veces pensamos que no tenemos solución.

Obviamente los conocimientos, la experiencia y la preparación nos hacen salir a camino en las soluciones de los problemas y dificultades hasta cierto punto.

Dios nos da una exhortación muy importante, y es que le dejemos los grandes problemas a Él, que se los entreguemos, para que Él tome el dominio y el control de nuestras grandes dificultades.

Las cosas que son difíciles para nosotros, para Dios no lo son, Él hace

“LO DIFÍCIL TRANSFORMADO”

Es decir, transforma lo difícil en fácil, lo imposible lo transforma en posible, esa es la promesa que tenemos, el secreto consiste en la fe.

Si podemos creer, lo difícil vamos a entregárselo a Dios, porque para Dios no hay nada difícil,  “!OH SEÑOR JEHOVÁ! HE AQUÍ QUE TÚ HICISTE EL CIELO Y LA TIERRA CON TU GRAN PODER, Y CON TU BRAZO EXTENDIDO, NI HAY NADA QUE SEA DIFÍCIL PARA TÍ”, Jeremías 32: 17.

Así como el profeta mayor Jeremías creyó y obtuvo su bendición, hoy Dios quiere darnos su bendición, esperando que le entreguemos nuestras batallas, y según creamos, Dios hará.

Si no conoces a Jesús, hoy es un precioso día para recibirlo en tu corazón, ven a Él !!!

Dios te bendiga rica y poderosamente,

Héctor Paula
Para la gloria de Dios

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