LECTURA
BÍBLICA DE HOY:
“QUIERO, PUES, QUE LOS HOMBRES OREN EN TODO LUGAR,
LEVANTANDO MANOS SANTAS, SIN IRA NI CONTIENDA”, 1 Timoteo 2: 8.
Gracias Dios
mío por tu Palabra. Gracias por tu Gracia, gracias por tus maravillas, te
alabamos y te adoramos Padre Amado, porque tuyo es el imperio, la majestad y la
gloria por los siglos, danos sabiduría de lo alto, unge nuestras rodillas y
glorifícate en la vida de los lectores y lectoras, en el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE:
Cuando
hablamos de cómo tenemos las manos en nuestra cotidianidad, estamos hablando de
honestidad y seriedad al momento de decirle a alguien que tiene manos limpias,
y si la persona roba o hace lo mal hecho decimos que tiene manos sucias.
Es muy
cuesta arriba hablar estas cosas, porque cada uno de nosotros solamente sabemos
la manera en que se conducen nuestras manos, espiritualmente hablando, obviamente
Dios también sabe cómo nos conducimos, a Él no podemos engañar.
Lo que Dios
nos quiere mostrar en esta hora, es que nos necesita con
“MANOS
SANTAS”
Para
nosotros poder presentarnos ante Dios debemos de tener las manos santas, esto es
muy significativo para Dios, pues si clamamos a Él haciendo lo mal hecho,
estamos, no engañando a Dios, estamos engañándonos a nosotros mismos.
Es por eso
que esta Palabra de Dios es tan real, es una Palabra que nos conduce a caminos
de verdad y salvación, tenemos que levantar manos santas, “QUIERO, PUES, QUE
LOS HOMBRES OREN EN TODO LUGAR, LEVANTANDO MANOS SANTAS, SIN IRA NI CONTIENDA”,
1 Timoteo 2: 8.
Sabemos lo
complicada que se ha tornado la situación global, estamos en medio de una
pandemia, pero además de eso, las grandes mayorías han decidido darle la
espalda a Dios.
Es hora de que dejemos a Jesús entrar a
nuestros corazones, para que el Espíritu Santo haga la obra en nuestra vida
espiritual a través de la Sangre Redentora de Jesús.
Si no lo
conoces, ven a Él !!!
Héctor Paula
Para la gloria de Dios
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