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LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Gracias Jehová por tu Palabra, bendice a los lectores
y lectoras, úngelos con tu gracia y misericordia y no permitas que ninguno se
pierda, reprende al devorador de las almas y glorifícate en el siguiente
mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** SERMÓN *** REFLEXIÓN:
Se nos desploma la sociedad, se nos destruye el
hogar, el matrimonio casi a punto de colapsar.
No se trata de la descripción de una película de
terror, se trata del escenario que estamos presenciando con estupor y dolor.
Los hechos relevantes ocurridos recientemente nos
deben mover a profunda reflexión de este panorama actual.
No podemos seguir inertes e inmutables, tenemos
que actuar porque dentro de poco la violencia, la delincuencia, la maldad y la
criminalidad nos van a desplazar.
Hemos fallado, porque la gran mayoría le ha dado
las espaldas a Dios.
El hogar es la base que sustenta la sociedad.
En términos generales, el hogar pasa por grandes
dificultades. El enemigo de las almas
sabe perfectamente que si destruye el hogar, se destruye la sociedad y esto no
puede seguir así.
Dios nos está dando las pautas a seguir.
Lo primero es entregarnos en espíritu y en verdad
a Cristo, no podremos combatir solos esta guerra sucia que el enemigo nos ha
declarado desde la misma creación.
Si dejamos nuestros hijos a merced de sus
entornos, ya sea en los estudios, ya sea en el trabajo, serán presas fáciles de
un enemigo que no duerme para matar, destruir y hurtar.
Dios nos está exhortando a retomar el camino, a
hacer un nuevo pacto. Estamos fallando y
a lo mejor no nos damos cuenta.
La mujer tiene un papel protagónico en la
relación de pareja, siempre he dicho que el éxito ó el fracaso del hogar está
en manos de la mujer, “LA MUJER VIRTUOSA ES CORONA DE SU MARIDO; MAS LA MALA,
COMO CARCOMA EN SUS HUESOS”, Proverbios 12: 4.
Obviamente esto no libera de responsabilidad al
hombre, en cuanto al éxito ó al fracaso del matrimonio, porque todo lo que
surja dentro de él, es responsabilidad compartida entre ambos, en mitad y
mitad.
No existe ninguna excusa, ambos comparten la
responsabilidad en el surgimiento de los problemas, obviamente la mujer tiene
más ecuanimidad que el hombre y en ella recae la gran cuota.
Es a ti mujer que te toca el papel de ser virtuosa, y verás los resultados
en tu matrimonio, “MUJER VIRTUOSA, ¿QUIÉN LA HALLARÁ? PORQUE SU ESTIMA
SOBREPASA LARGAMENTE A LA DE LAS PIEDRAS PRECIOSAS”, Proverbios 31: 10.
“¿QUÉ HA FALLADO EN EL HOGAR?”
Es la gran pregunta.
Lamentablemente el hombre se ha ido a buscar
aventuras fuera del matrimonio, y esto ha sido como un cáncer espiritual en el
hogar, porque el adulterio ha permeado en una gran parte de los matrimonios.
Hay que reprender ese espíritu machista que
domina tanto en nuestra Latinoamérica principalmente.
La mujer tampoco puede adulterar, esto es
pecaminoso y ofensivo.
Dios nos ordena a que el matrimonio sea honroso y
que el lecho sea sin mancilla, desechando la fornicación y el adulterio, “HONROSO
SEA EN TODOS EL MATRIMONIO, Y EL LECHO SIN MANCILLA; PERO A LOS FORNICARIOS Y A
LOS ADÚLTEROS LOS JUZGARÁ DIOS”, Hebreos 13: 4.
No dejes a Cristo fuera de la dirección de tu
hogar.
Jesús debe ser el eje principal en tu relación y
la de tus hijos. Vamos a impregnar de
amor nuestros hogares. La tecnología ha
sustituido el amor de padres y esto no puede seguir.
Vamos a equilibrar el asunto.
La tecnología es importante, pero debemos
dedicarles más tiempo a nuestros hijos.
Nosotros somos los que fallamos al no suministrarles suficiente calor y
amor.
Todavía estamos a tiempo.
Cristo quiere ser el protagonista de tu hogar.
Déjalo que ocupe ese lugar.
Jesús te ama y te llama,
Dios te guarde,
Héctor Paula
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