miércoles, 24 de julio de 2013

"FE Ó NO FE"


Foto por: cristianosnazarenosmixq.blogspot.com

 

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

 

Y JESÚS FUE CON ELLOS. PERO CUANDO YA NO ESTABAN LEJOS DE LA CASA, EL CENTURIÓN ENVIÓ A ÉL UNOS AMIGOS, DICIÉNDOLE: SEÑOR, NO TE MOLESTES, PUES NO SOY DIGNO DE QUE ENTRES BAJO MI TECHO; POR LO QUE NI AUN ME TUVE POR DIGNO DE VENIR A TI; PERO DI LA PALABRA, Y MI SIERVO SERÁ SANO”, Lucas 7: 6-7

 

Gracias Dios mío por tu Palabra Santa y Perfecta, gracias por tus misericordias, que son nuevas cada mañana, bendice los lectores y lectoras de una manera especial, obra milagros en sus vidas, sana al enfermo, levanta al caído y dale fortaleza al que la necesita. Reprende al hombre fuerte, y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

 

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** REFLEXIÓN:

 

Les debo una disculpa, pues el mensaje no salió el martes, obviamente estuve de viaje tres días en Barahona, provincia al sur de mi País, por lo que acudo a su comprensión y me excusen, pero aquí estamos de nuevo gracias a Dios.

 

Una gran parte de las cosas negativas que nos ocurren se deben, básicamente a la falta de fe.

 
Dios nos ha provisto de esta herramienta llamada fe, la cual es la fuerza de cohesión que une al creyente con Dios.
 

No es que existen muchos problemas en el pueblo de Dios, lo que está sucediendo es la escasez de fe, sobre todo en estos tiempos postreros.

 
Jesús lo profetizó muy claramente, “OS DIGO QUE PRONTO LES HARÁ JUSTICIA. PERO CUANDO VENGA EL HIJO DEL HOMBRE, ¿HALLARÁ FE EN LA TIERRA?", Lucas 18: 8.

 

La fe sobrenatural de Dios se ha ido reemplazando poco a poco por la fe de la prosperidad aquí en la tierra, y vemos algunos ministros y pastores viviendo como verdaderos jeques petroleros, con toda clase de lujos.

 

Pero, tendrán que dar cuentas a Dios en aquel día ineludible en que todos tendremos que acudir al tribunal de Cristo.

 
El centurión no lo pensó dos veces, él quería buscar su bendición que consistía en que su siervo sanara, y no puso por delante el poder militar y político que poseía.

 
Este centurión solo quería llegar a Jesús.  Este hombre solo tenía su fe en Jesús, no en sus posesiones ni en sus bienes, él estaba firmemente convencido de que solo a través de Cristo su siervo iba a sanar.

 
Y esto es lo que nos hace falta en estos tiempos, estar convencidos de que Cristo vive y tiene poder.

 
Las enfermedades, el cáncer, las dificultades se reducen a

 

 “FE Ó NO FE”

 
Si tienes fe, vas a triunfar, declárate en victoria y pídele a Jesús que solo diga la Palabra para que tu problema sea resuelto, “Y JESÚS FUE CON ELLOS. PERO CUANDO YA NO ESTABAN LEJOS DE LA CASA, EL CENTURIÓN ENVIÓ A ÉL UNOS AMIGOS, DICIÉNDOLE: SEÑOR, NO TE MOLESTES, PUES NO SOY DIGNO DE QUE ENTRES BAJO MI TECHO; POR LO QUE NI AUN ME TUVE POR DIGNO DE VENIR A TI; PERO DI LA PALABRA, Y MI SIERVO SERÁ SANO”, Lucas 7: 6-7

 

Jesús se maravilló de la fe de este centurión, “AL OÍR ESTO, JESÚS SE MARAVILLÓ DE ÉL, Y VOLVIÉNDOSE, DIJO A LA GENTE QUE LE SEGUÍA: OS DIGO QUE NI AUN EN ISRAEL HE HALLADO TANTA FE”, Lucas 7: 9.

 

Dios te guarde,

 

Héctor Paula

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