"ELEGIDOS DESDE EL VIENTRE"

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LECTURA BÍBLICA DE HOY:

 

“PERO CUANDO AGRADÓ A DIOS, QUE ME APARTÓ DESDE EL VIENTRE DE MI MADRE, Y ME LLAMÓ POR SU GRACIA”, Gálatas 1: 15.

 

Gracias Dios mío por tu Palabra, gracias por tus misericordias, que son nuevas cada mañana, te presento los lectores y lectoras, sálvalos a los que no te conocen, liberta al cautivo, sana al enfermo, da fuerzas al que no la tiene, reprende al hombre fuerte y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

 

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** REFLEXIÓN:

 

Cuando Dios se da cuenta que no puede con la rebeldía del hombre, la tierra se quedó alrededor de cuatrocientos años sin un profeta que predicase la Palabra.

 

Dios decide, luego de ese tiempo y por amor a la humanidad, enviar a su Hijo Unigénito al mundo, para que todo aquel que en Él crea pueda ser salvo y perdonado todos sus pecados.

 

De la misma manera que Jesús elige a los doce discípulos, de esa misma manera, Dios nos eligió a los hombres y mujeres que le serviríamos a Él, nos convertiríamos y nos arrepentiríamos.

 

Pablo fue el mejor ejemplo, aún siendo un pecador y perseguidor de cristianos, “PERO CUANDO AGRADÓ A DIOS, QUE ME APARTÓ DESDE EL VIENTRE DE MI MADRE, Y ME LLAMÓ POR SU GRACIA”, Gálatas 1: 15.

 

Esto quiere decir que los cristianos hemos sido apartados y llamados desde el vientre de nuestras madres.

 

En mi caso, he podido ver que desde niño, Dios tuvo un cuidado especial con mi vida, pues Él sabía que en esta hora yo le iba a estar sirviendo, y que el 18 de agosto del año 2000 yo iba a recibir a Cristo en mi corazón como mi único y suficiente Salvador, porque Dios tiene el control de todo en este mundo y sabe cuándo, dónde y cómo nos va a llamar al redil de Cristo.

 

Es por eso que no puedes endurecer tu corazón cuando sientas que Dios te está llamando, ya sea a través de una canción cristiana, a través de un tratadito, a través de un mensaje que oigas ó leas.

 

Porque es muy posible que tú seas uno de los que hemos tenido el privilegio divino de ser

 

“ELEGIDOS DESDE EL VIENTRE”

 

 

Y aquí tenemos una gran promesa.

 

Ya antes de que nos formamos en el vientre, Dios nos conoce.

 

Antes de nacer ya Dios nos santifica y nos da por profetas a las naciones, así como lo hizo con Jeremías, “ANTES QUE TE FORMASE EN EL VIENTRE TE CONOCÍ, Y ANTES QUE NACIESES TE SANTIFIQUÉ, TE DI POR PROFETA A LAS NACIONES”, Jeremías 1: 5.

 

Es tiempo de creerle a Dios. 

 

 

 

Vamos a tomar el rol para el cual Él nos eligió, y tú que no lo conoces, no le cierres tu corazón, porque tú también has sido elegido desde el vientre de tu madre.

 

¿Ó acaso no te has dado cuenta los milagros que Dios ha hecho en tu vida y te ha librado incluso de la muerte?

 

 

Esto no es casualidad, Dios te ha elegido, ven en esta misma hora a los pies de Cristo, ese es el llamado que Dios te hace en estos tiempos finales.

 

Dios te guarde,

 

 

Héctor Paula