"EL AGUA QUE QUITA LA SED"

Foto por: recetadecocinablog.com

 

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

 

“RESPONDIÓ JESÚS Y LE DIJO: CUALQUIERA QUE BEBIERE DE ESTA AGUA, VOLVERÁ A TENER SED; MAS EL QUE BEBIERE DEL AGUA QUE YO LE DARÉ, NO TENDRÁ SED JAMÁS; SINO QUE EL AGUA QUE YO LE DARÉ SERÁ EN ÉL UNA FUENTE DE AGUA QUE SALTE PARA VIDA ETERNA”, Juan 4: 13-14.

 

Gracias Dios mío por tu Palabra, gracias por las pruebas, gracias por las bendiciones, gracias por tu gracia. Bendice los lectores y lectoras, contesta sus peticiones en tu tiempo, Padre Amado, reprende toda obra de maldad y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

 

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** REFLEXIÓN:

 

Jesús había salido de Judea a Galilea, pero tenía que pasar por Samaria.

 

Había caminado mucho y se sentó junto al pozo del lugar, y cuando una mujer de Samaria vino a sacar agua del pozo, Jesús le dijo que le diera de beber, “VINO UNA MUJER DE SAMARIA A SACAR AGUA; Y JESÚS LE DIJO: DAME DE BEBER”, Juan 4: 7.

 

Lo más lejos que tenía esta mujer era que quien le pedía agua era nada más y nada menos que el Rey de reyes y Señor de señores, Jesús de Nazaret.
 

Y esta parte también nos toca a nosotros hoy en día, cuantas veces Jesús nos pide agua. Y aquí el Señor lo que quiere es llamarnos a reflexión, que nos fijemos en Él, que no lo ignoremos.

 

Porque a lo mejor cuando se nos acerca un necesitado y lo rechazamos, en ese momento es al mismo Jesús que estamos rechazando.

 

Aquella mujer estaba muy confundida, porque los samaritanos y los judíos no se trataban entre sí, incluso le pregunta al Maestro que como es posible, que siendo judío, le pidiese agua a ella siendo samaritana.

 

Y hoy Dios quiere dejarnos establecido que cuando estés confundido, confundida, vengas a la Palabra y vas a encontrar respuestas, porque Jesús inmediatamente le dio respuesta a aquella mujer, que siempre estuvo atenta, no se distrajo, ella sabía que podía encontrar su bendición ante aquel dilema que tenía frente a sí.

 

Y es cuando la luz de Jesús ilumina su mente, su corazón al escuchar aquella dulce voz del Maestro cuando le dijo: “RESPONDIÓ JESÚS Y LE DIJO: CUALQUIERA QUE BEBIERE DE ESTA AGUA, VOLVERÁ A TENER SED; MAS EL QUE BEBIERE DEL AGUA QUE YO LE DARÉ, NO TENDRÁ SED JAMÁS; SINO QUE EL AGUA QUE YO LE DARÉ SERÁ EN ÉL UNA FUENTE DE AGUA QUE SALTE PARA VIDA ETERNA”, Juan 4: 13-14.

 

En ese momento es que ella entiende que Jesús es

 

“EL AGUA QUE QUITA LA SED”

 

 Y en esta hora Dios quiere que tú y yo entendamos también que en Jesús no tendremos sed espiritual jamás, aquella mujer lo entendió y pidió su bendición, “LA MUJER LE DIJO: SEÑOR, DAME ESA AGUA, PARA QUE NO TENGA YO SED, NI VENGA AQUÍ A SACARLA”, Juan 4: 15.

 

Es tiempo de que pidas esa agua tú también si no conoces a Jesús, y vas a disfrutar de grandes promesas, las cuales te llevarán a vida eterna en Cristo Jesús.

 

Las bodas del Cordero se acercan, las bodas de la iglesia con Jesús se acercan, y el Espíritu Santo nos llama a beber del agua, que ahora es gratuita, mañana puede ser tarde, “Y EL ESPÍRITU Y LA ESPOSA DICEN: VEN. Y EL QUE OYE, DIGA: VEN. Y EL QUE TIENE SED, VENGA; Y EL QUE QUIERA TOME DEL AGUA DE LA VIDA GRATUITAMENTE”, Apocalipsis 22: 17.

 

Ven a beber del agua de la vida que es Cristo Jesús, Señor nuestro.

 

Dios te bendiga,

 

Héctor Paula