"SUEÑOS, VIDA Y REALIDAD"

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LECTURA BÍBLICA DE HOY:

“DONDE ABUNDAN LOS SUEÑOS, TAMBIÉN ABUNDAN LAS VANIDADES Y LAS MUCHAS PALABRAS; MAS TÚ, TEME A DIOS”, Eclesiastés 5: 7.

Gracias Dios mío por tu Palabra, gracias por darnos el aire que respiramos, gracias porque permites que veamos la luz de un día más. Te presento a cada lector, a cada lectora, líbralos de todo mal y obra milagros en la vida de cada uno de ellos y de ellas. Reprende al hombre fuerte y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** SERMÓN *** REFLEXIÓN:

Gran parte de nuestras vidas la pasamos soñando, porque soñamos durmiendo, pero también soñamos despiertos.

Obviamente, de las 24 horas que tiene el día normalmente dormimos seis u ocho horas promedio, por lo que dormimos aproximadamente un 30% de nuestro tiempo, lo cual es significativo. 

Pero quiero que hablemos de los sueños despiertos.  

El martes hablábamos en mi trabajo, en un receso, acerca de los sueños. 

Uno decía que soñaba con un yate y un avión, para vivir en una isla apartada. 

Otro soñaba con un Lamborghini, y así cada quién fue exponiendo sus sueños.

Los cristianos que estábamos en aquel lugar obviamente expusimos nuestros sueños en el orden espiritual y aquí es donde Dios quiere que nos detengamos. 

La Palabra de Dios nos dice que todo esto que no es espiritual, es vanidad, “DONDE ABUNDAN LOS SUEÑOS, TAMBIÉN ABUNDAN LAS VANIDADES Y LAS MUCHAS PALABRAS; MAS TÚ, TEME A DIOS”, Eclesiastés 5: 7. 

Dios nos ordena a temerle.  

La persona que ha tomado la decisión de vivir para Cristo y tiene el temor de Dios en su vida, es inteligente, es sabia, "EL TEMOR DE JEHOVÁ ES EL PRINCIPIO DE LA SABIDURÍA, Y EL CONOCIMIENTO DEL SANTÍSIMO ES LA INTELIGENCIA", Proverbios 9: 10. 

¿Cuál es tu sueño?   

Es una pregunta muy linda, pero en esta hora quiero decirte que tienes todo el derecho de tener tus sueños, pero no te olvides de tu vida espiritual, Jesús murió por ti y por mí, derramó su Preciosa Sangre para que puedas tener el mejor de los sueños: tu salvación.

Aquel ladrón en la cruz al lado de Jesús tuvo un sueño y se hizo realidad con tan solo aceptar a Jesús, ese mismo día, cuando Jesús le dijo: “ENTONCES JESÚS LE DIJO: DE CIERTO TE DIGO QUE HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO”, Lucas 23: 43.

Cuando vienes a Cristo tienes la promesa de un gran sueño.  Es hora de despertar, es hora de ver la realidad de la vida: somos como ave de paso en esta tierra, y Dios nos creó para vida eterna. 

“SUEÑOS, VIDA Y REALIDAD” 

La vida en nosotros se llama Jesucristo, ese es nuestro sueño hecho realidad, ven a Él para que puedas llegar al Padre, porque Cristo es la vida, “Y JESÚS LE DIJO: YO SOY EL CAMINO, Y LA VERDAD, Y LA VIDA; NADIE VIENE AL PADRE SINO POR MÍ”, Juan 14: 6.

Veremos en el cielo cosas que ojo no vió, ni oído oyó, “ANTES BIEN, COMO ESTÁ ESCRITO: COSAS QUE OJO NO VIO, NI OÍDO OYO, NI HAN SUBIDO EN CORAZÓN DE HOMBRE, SON LAS QUE DIOS HA PREPARADO PARA LOS QUE LE AMAN”, 1ra. Corintios 2: 9.

Ya es el tiempo, ya es hora de levantarnos del sueño, porque nuestra redención, nuestra salvación está más cerca de cuando creímos, “Y ESTO, CONOCIENDO EL TIEMPO, QUE ES YA HORA DE LEVANTARNOS DEL SUEÑO; PORQUE AHORA ESTÁ MÁS CERCA DE NOSOTROS NUESTRA SALVACIÓN QUE CUANDO CREÍMOS”, Romanos 13: 11.

Iglesia, levántate tú que duermes. 

Hermano, hermana, levántate tú que duermes.

Amigo, amiga, levántate tú que duermes.

Cristo está a las puertas. 

Dios les guarde, 

Héctor Paula