"CUIDADO CON LAS TENTACIONES"

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LECTURA BÍBLICA DE HOY:

 

“Y VINO A ÉL EL TENTADOR, Y LE DIJO: SI ERES HIJO DE DIOS, DI QUE ESTAS PIEDRAS SE CONVIERTAN EN PAN. ÉL RESPONDIÓ Y DIJO: ESCRITO ESTÁ: NO SOLO DE PAN VIVIRÁ EL HOMBRE, SINO DE TODA PALABRA QUE SALE DE LA BOCA DE DIOS”, Mateo 4: 3-4.

 

Gracias Dios mío por tu Palabra. Te presento los lectores y lectoras, convéncelos en el silencio de la noche, trata con cada uno de ellos y ellas y no permitas que ninguno se pierda. Reprende toda fuerza de las tinieblas y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

 

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** REFLEXIÓN:

 

El flagelo de la tentación nació con la misma creación del hombre y la mujer.

 

Estamos sufriendo los efectos de la tentación en el huerto del Edén, cuando Adán y Eva comieron del fruto prohibido y Dios determinó juicio en ese mismo escenario.

 

Dios tenía una relación perfecta con el hombre, pero la tentación echó por la borda esa relación.

 

La tentación es algo terrible. 

 

Y obviamente ella proviene del mismo infierno, allá es producida  con todas las envolturas engañosas que el enemigo de las almas ofrece a todos los incautos e incautas que se han dejado atrapar en sus garras.

 

En el pueblo de Dios la cosa es alarmante, porque el mundo ha sido conquistado y acorralado en su gran mayoría por la tentación y día a día, millones son atraídos en ese manto de placeres y deleites con los que se disfraza la tentación.

 

Pero en el pueblo de Dios, la guerra espiritual en cuanto a la tentación se refiere, es una guerra sin cuartel, es despiadada porque el enemigo de las almas no descansa en su afán de destruir a los hombres y mujeres de Dios.

 

Por eso Dios nos trae una alerta inminente, porque son muchos y muchas los evangélicos y evangélicas que libran esta batalla con las tentaciones.

 

Y es que la tentación se disfraza de muchas cosas para seducir al hombre y/o a la mujer de Dios. 

 

Ella va a aparecer siempre, el éxito está en no caer en sus encantos, tenemos una bendición cada vez que se nos presenta una tentación y la soportamos, “BIENAVENTURADO EL VARÓN QUE SOPORTA LA TENTACIÓN; PORQUE CUANDO HAYA RESISTIDO LA PRUEBA, RECIBIRÁ LA CORONA DE VIDA, QUE DIOS HA PROMETIDO A LOS QUE LE AMAN”, Santiago 1: 12.

 

Dios nos dice en esta hora:

 

“CUIDADO CON LAS TENTACIONES”

  

Lo que nos asegura la victoria sobre las tentaciones es la oración, porque el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil, “VELAD Y ORAD, PARA QUE NO ENTRÉIS EN TENTACIÓN; EL ESPÍRITU A LA VERDAD ESTÁ DISPUESTO, PERO LA CARNE ES DÉBIL”, Mateo 26: 41.

 

 

No podemos combatir la tentación por nuestro propio esfuerzo, tenemos que orar con súplica y ruego a Dios, para que el Espíritu Santo pueda fortalecernos y podamos salir gananciosos en esta guerra tan feroz.

 

Vamos a orar, vamos a orar y luego vamos a seguir orando y reprendiendo en el nombre de Jesús, es la única forma de que el enemigo tendrá que huir de nosotros con todo y sus tentaciones.

 

 

Dios les bendiga,

 

 

Héctor Paula