“AFLICCIONES REPRIMIDAS”

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

Romanos 8: 18, “PUES TENGO POR CIERTO QUE LAS AFLICCIONES DEL TIEMPO PRESENTE NO SON COMPARABLES CON LA GLORIA VENIDERA QUE EN NOSOTROS HA DE MANIFESTARSE”

Gracias Dios mío por tu Palabra. Te presento los lectores y lectoras en esta hora, atiende sus peticiones en tu tiempo Padre Amado, obra milagros en sus vidas, no permitas que ninguno se pierda, convéncelos de pecado, juicio y justicia, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE:   

En mi país existe un refrán muy conocido: “HAMBRE QUE ESPERA JARTURA (ESTOMAGO LLENO) NO ES HAMBRE”.

Esto quiere decir obviamente que una persona que esté pasando por un proceso difícil, tiene la seguridad que en unos días recibirá la ayuda que necesita, entonces ese proceso se hace más esperanzador, debido a que muy pronto se tiene la convicción de que esa ayuda que recibirá le resolverá el problema.

Hace días que en mi caso pasaba por varios procesos difíciles, muy difíciles al extremo de que mi salud se vio afectada, pero le pedía a Dios que me ayudara a salir de esas grandes dificultades por las que atravesaba.

Dios me dio la salida y esperaba con paciencia, aún en medio de lo que me ocurría, porque sabía que muy pronto esos problemas se iban a resolver y así pasó, gracias le doy a Dios que los problemas se resolvieron y me encuentro en este momento con una paz interior que hacía mucho no sentía.

Es entonces que puedo decir que las aflicciones que atravesaba se convirtieron en

“AFLICCIONES REPRIMIDAS”

Dios las reprimió, se las llevó, así mismo será en el tiempo venidero, en las promesas que Dios nos tiene a los que nos hemos separado del mundo y hemos adoptado este evangelio de Jesucristo.

En estos tiempos nos llegan aflicciones, pero estas aflicciones jamás serán comparables con lo que viene en aquellos días de crisis mundial, en que Dios va a desatar ira sobre la tierra, en nosotros se cumplirá esta promesa de la gloria que nos espera, “PUES TENGO POR CIERTO QUE LAS AFLICCIONES DEL TIEMPO PRESENTE NO SON COMPARABLES CON LA GLORIA VENIDERA QUE EN NOSOTROS HA DE MANIFESTARSE”,  Romanos 8: 18.

Vamos a continuar en este evangelio, vamos a orar, vamos a clamar por nuestra salvación, no la vendamos por un plato de lentejas.

Si no conoces a Jesús, aún respiras, estás a tiempo de venir a su redil !!!

Dios te bendiga !!!        

   

Héctor Paula.

Para la Gloria de Dios