LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Colosenses 3: 15, “Y LA
PAZ DE DIOS GOBIERNE EN VUESTROS CORAZONES, A LA QUE ASIMISMO FUISTEIS LLAMADOS
EN UN SOLO CUERPO; Y SED AGRADECIDOS”
Gracias Dios mío por tu Palabra.
Te presento los lectores y lectoras, mira sus peticiones, abre puertas
primeramente espirituales y luego materiales, envíales un espíritu de búsqueda
de tus caminos, háblales en el silencio apacible de la noche, rompe toda
cadena, pudre todo yugo de esclavitud, en el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE:
El corazón es el centro de nuestras
emociones cuando no han podido ser procesadas en nuestros pensamientos, y estas
emociones cuando llegan al corazón pueden convertirse en un peligro ó en una
bendición.
Si las emociones son agradables a
Dios, entonces el resultado, cuando se llevan al corazón, se traduce en una
persona dulce, entregada y dispuesta a servir con ansias a los demás.
Pero si esas emociones que llegan al
pensamiento son emociones negativas, entonces si llegan al corazón tendremos
personas dañinas, tóxicas, incluso capaces de ejecutar actos violentos,
agresivos, incluso mortales.
No podemos dejar que nuestras
emociones lleguen al corazón, porque es engañoso, “ENGAÑOSO ES EL CORAZÓN MÁS
QUE TODAS LAS COSAS, Y PERVERSO; ¿QUIÉN LO CONOCERÁ?”, Jeremías 17: 9
Es por eso que vemos tanta violencia,
porque los tiempos que vivimos nos han colocado muy a la defensiva, y nuestros
entornos cotidianos son adversos, nos bombardean continuamente, saturando
nuestras capacidades humanas y obviamente dejamos que los pensamientos pasen al
corazón.
Esta situación nos ha llevado, en
términos generales a
“CORAZONES INGOBERNADOS”
Y eso no debe ser.
Dios nos está advirtiendo acerca del
peligro de dejar pasar las cosas al corazón, ahí se van los rencores, los malos
sentimientos, la infidelidad, el odio, la violencia y lo que vemos en este
mundo real.
Dios quiere gobernar nuestros
corazones. Esa es la única forma de que nuestros corazones permanezcan
impenetrables a malos visitantes.
Tenemos que blindar nuestros
corazones, y para lograrlo tenemos que dejar a Dios que los gobierne con su paz,
“Y LA PAZ DE DIOS GOBIERNE EN VUESTROS CORAZONES, A LA QUE ASIMISMO FUISTEIS
LLAMADOS EN UN SOLO CUERPO; Y SED AGRADECIDOS”, Colosenses 3: 15.
Es tiempo de escuchar y obedecer la
voz de Dios.
Los tiempos están duros y peligrosos,
vamos a sumergirnos más en este evangelio de Jesucristo !!!
Si no conoces a Jesús, corre a Él
ahora que puedes respirar !!!
Dios
te bendiga !!!
Héctor Paula.
Para la Gloria de
Dios
No hay comentarios:
Publicar un comentario