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LECTURA BÍBLICA DE HOY:
“VOSOTROS SOIS LOS HIJOS DE LOS PROFETAS, Y DEL
PACTO QUE DIOS HIZO CON VUESTROS PADRES, DICIENDO: EN TU SIMIENTE SERÁN
BENDITAS TODAS LAS FAMILIAS DE LA TIERRA”, Hechos 3: 25.
Gracias Dios mío por habernos permitido ver un año
más. Te presento los lectores y lectoras, que en este nuevo año tú los colmes
de ricas bendiciones, primero espirituales y luego materiales, háblales en el
silencio de la noche y provoca milagros en sus vidas. Reprende toda fuerza
maligna y glorifícate en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** REFLEXIÓN:
Deben de existir tres prioridades en la vida de cada
uno de nosotros, DIOS, FAMILIA, TRABAJO.
Hemos sido creados para salvación, obviamente como
todo en la vida, cumpliendo los requisitos establecidos en la Biblia y que
tienen su base en la Sangre Preciosa de Cristo.
El sacrificio que Jesús hizo en la Cruz del Calvario
no fue en vano, fue un sacrificio para que todos podamos alcanzar misericordia,
y es este sacrificio que te presento como el gran preámbulo de este mensaje.
Jesús es la simiente profetizada, “AHORA BIEN, A
ABRAHAM FUERON HECHAS LAS PROMESAS, Y A SU SIMIENTE. NO DICE: Y A LAS
SIMIENTES, COMO SI HABLASE DE MUCHOS, SINO COMO DE UNO: Y A TU SIMIENTE, LA
CUAL ES CRISTO”, Gálatas 3: 16.
Es por eso que en esta hora Dios nos hace entender
que en Cristo tenemos promesas, no solo de salvación, sino que las familias
serán benditas, “VOSOTROS SOIS LOS HIJOS DE LOS PROFETAS, Y DEL PACTO QUE DIOS
HIZO CON VUESTROS PADRES, DICIENDO: EN TU SIMIENTE SERÁN BENDITAS TODAS LAS
FAMILIAS DE LA TIERRA”, Hechos 3: 25.
La familia constituye la base, no solo de la
sociedad, sino del mandato divino de que el hombre y la mujer serán una sola
carne.
Pero el enemigo de las almas sabe esto y se ha
volcado despiadada e implacablemente contra la familia, provocando divisiones,
divorcios, rompimientos y enemistades en proporciones alarmantes.
Pero Dios tiene promesas en Cristo para tí que lees
este mensaje, y es que en este
“COMIENZO DEL AÑO: LA FAMILIA”
Debe de constituir tu más importante activo, obviamente después de Dios.
No descuides tu familia,
No descuides tu pareja,
No descuides tus hijos.
El trabajo es importante y fundamental, pero tienes
que sacarle tiempo a tu familia.
Envía tus niños a la Escuela Bíblica, no dejes de
llevarlos a la iglesia.
Ven a Cristo y vas a ser partícipe de las promesas,
“ELLOS DIJERON: CREE EN EL SEÑOR JESUCRISTO, Y SERÁS SALVO, TÚ Y TU CASA”,
Hechos 16: 31.
Dios te guarde,
Héctor Paula
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