LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Jeremías 14: 7, “AUNQUE
NUESTRAS INIQUIDADES TESTIFIQUEN CONTRA NOSOTROS, OH JEHOVÁ, ACTÚA POR AMOR DE
TU NOMBRE; PORQUE NUESTRAS REBELIONES SE HAN MULTIPLICADO, CONTRA TI HEMOS
PECADO”
Gracias Dios mío por tu Palabra.
Gracias por las pruebas, gracias por las bendiciones, te damos toda la gloria,
porque tuyo es el imperio, la majestad y la honra, te alabamos y adoramos tu
nombre, bendice los lectores y lectoras de una manera especial, establece tu
orden divino en la vida de cada uno de ellos y ellas, en el nombre de Jesús.
Amén.
MENSAJE:
Dios ha tenido un pleito con la
humanidad desde la misma creación, la desobediencia y la rebeldía del hombre
caracterizaron prácticamente todo el Antiguo Testamento, y aún el Nuevo .
Por más que Dios intentaba provocar
un arrepentimiento genuino, el hombre era cada vez más rebelde, al extremo de
que Dios tuvo que enviar el diluvio, porque no bastó la prédica de Noé para que
la gente se arrepintiera.
En cada dispensación, Dios trataba y
trataba con el hombre, la sangre de animalitos, corderos y machos cabríos que el sumo
sacerdote esparcía sobre el pueblo una vez al año, sólo podía cubrirlos, pero
no lograba arrepentimiento.
Dios tuvo más de cuatrocientos años
incomunicado con la humanidad a través de sus profetas, y existía
“UNA SÚPLICA POR AMOR”
Es así que Dios, por amor a su
creación decide tomar la decisión de enviar a su Hijo Unigénito al mundo a
derramar su Sangre para poder lograr un verdadero arrepentimiento, porque el
pecado había llegado al tercer cielo y Dios estaba muy inconforme.
Entonces nos
da esa hermosa oportunidad, de poder alcanzar salvación a través de esa Sangre
Preciosa e inmaculada que Jesús derramó, como un Cordero inmolado, porque sin
derramamiento de sangre no podía haber remisión de pecado.
Juan el bautista lo dijo muy claro,
cuando vio que Jesús se acercaba a él, “EL SIGUIENTE DÍA VIO JUAN A JESÚS QUE
VENÍA A ÉL, Y DIJO: HE AQUÍ EL CORDERO DE DIOS, QUE QUITA EL PECADO DEL MUNDO”,
Juan 1: 29.
Hemos pecado ante Dios, le hemos
fallado, hoy en día las grandes mayorías andan de espaldas a Dios, pero
existimos un remanente que aún permanecemos en este camino del evangelio de
Jesucristo, tú estás a tiempo de pertenecer a este remanente si es que no conoces a Jesús.
Nuestras iniquidades testifican
contra nosotros, pero Dios va a actuar por amor de su nombre y va a tener
misericordia, “AUNQUE NUESTRAS INIQUIDADES TESTIFIQUEN CONTRA NOSOTROS, OH
JEHOVÁ, ACTÚA POR AMOR DE TU NOMBRE; PORQUE NUESTRAS REBELIONES SE HAN
MULTIPLICADO, CONTRA TI HEMOS PECADO”,
Jeremías 14: 7.
Si no conoces a Jesús, el tiempo apremia,
corre a Él !!!
Dios
te bendiga !!!
Héctor
Paula.
Para la Gloria de
Dios
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