"CRECIENDO SABIAMENTE"

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

Colosenses 1: 10, “PARA QUE ANDÉIS COMO ES DIGNO DEL SEÑOR, AGRADÁNDOLE EN TODO, LLEVANDO FRUTO EN TODA BUENA OBRA, Y CRECIENDO EN EL CONOCIMIENTO DE DIOS”.

Gracias Dios mío por tu Palabra. Perdona nuestras ofensas, límpianos de toda inmundicia, rompe toda cadena, liberta al cautivo, dale fuerzas al débil, pudre todo yugo de las tinieblas, llévate toda depresión, no permitas que ninguno de nosotros nos perdamos, haznos propicios ante tus ojos, en el nombre de Jesús. Amén.

    

MENSAJE:  

Nuestro discurrir en esta vida está muy sujeto al crecimiento, en todo tenemos que crecer, de hecho nos preparamos desde que ya tenemos uso de razón para poder crecer no solamente en lo físico, sino también en lo académico o en la actividad que realicemos.

Lo importante es entender que es necesario el crecimiento donde quiera que estemos, en todo lo que realicemos debemos crecer, pues si no crecemos, entonces nos quedamos rezagados y esto genera sentimientos de culpa que luego nos hostigan.

Ya sea en el trabajo, ya sea en los estudios, ya sea dentro de la relación sentimental, ya sea en el trato con los demás, el crecimiento es fundamental.

Cuando Jesús se le perdió a sus padres, aún siendo un niño, ellos se preocuparon, porque habían subido a la fiesta de la Pascua en Jerusalén y el niño se le extravió con el gentío.

Luego de buscarlo, pudieron encontrarlo en la sinagoga, hablando con los doctores de la ley, dónde Jesús le dijo a sus Padres que no se preocuparan porque en los negocios de su Padre le era necesario estar.

Y dice la Palabra, “Y JESÚS CRECÍA EN SABIDURÍA Y EN ESTATURA, Y EN GRACIA PARA CON DIOS”, Lucas 2: 52.

Dios nos está exhortando a que estemos siempre

“CRECIENDO SABIAMENTE”

Debemos andar como es digno de Dios, siempre rectos, agradándole en todo, no en una parte, en todo y creciendo en sabiduría, “PARA QUE ANDÉIS COMO ES DIGNO DEL SEÑOR, AGRADÁNDOLE EN TODO, LLEVANDO FRUTO EN TODA BUENA OBRA, Y CRECIENDO EN EL CONOCIMIENTO DE DIOS”, Colosenses 1: 10.

Vamos a crecer espiritualmente, y para hacerlo debemos crecer hacia abajo en este evangelio, osea, mientras más nos humillamos ante Dios, más creceremos, mientras más estemos de rodillas más crecemos espiritualmente.

Sabemos y entendemos el tiempo que estamos viviendo, no hace falta explicar mucho que el mundo no anda bien, las cosas se han tornado de gris a oscuro, donde los valores casi los han convertido en desvalores, donde a lo bueno ya le llaman malo y a lo malo bueno.

Es el tiempo que Dios ya había profetizado en su diseño divino.

Vamos a crecer en Cristo y Él tomará dominio y control de las dificultades.

Si no conoces a Jesús, no lo pienses más, ven a Él !!!

Dios te bendiga !!!    

       

Héctor Paula.

Para la Gloria de Dios