LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Nehemías 2: 4, “ME DIJO
EL REY: ¿QUÉ COSA PIDES? ENTONCES ORÉ AL DIOS DE LOS CIELOS”.
Gracias Dios mío por tu
Palabra. Gracias por las pruebas, gracias por las bendiciones. Perdona nuestras
ofensas, nuestras debilidades, nuestras transgresiones. Guíanos hacia toda
verdad y justicia, ilumina la senda por donde caminamos, sé nuestra lumbrera
siempre, fortalécenos cada día, aumenta nuestra fe y no permitas que ninguno de
nosotros nos perdamos, en el nombre de
Jesús. Amén.
MENSAJE:
Nehemías era el copero
del rey, en Susa, capital del reino, él tenía que ver con todo lo que el rey bebía,
siendo un puesto privilegiado.
Pero Nehemías había sido
informado que Jerusalén estaba prácticamente destruída, el muro derribado y sus
puertas quemadas al fuego, lo que provocó en él una gran tristeza en su
semblante.
El rey se dio cuenta
cuando Nehemías había bebido el vino y le había servido la copa, y le
preguntó que por qué estaba triste su rostro, a lo que Nehemías le contestó que
su casa, osea Jerusalén estaba desierta y sus puertas consumidas por el fuego.
El alma de Nehemías
estaba compungida, abatida y es cuando el rey le pregunta que qué cosa pediría, “ME
DIJO EL REY: ¿QUÉ COSA PIDES? ENTONCES ORÉ AL DIOS DE LOS CIELOS”, Nehemías 2:
4.
Esto fue un gran
acontecimiento en el orden espiritual, ¿usted puede imaginarse que el presidente
de su país, le pregunte qué usted quiere?, eso es algo que en nuestra
naturaleza humana, en seguida le decimos al presidente la necesidad más grande
que podamos tener.
Pero, Nehemías no se
precipitó a contestarle al rey lo primero que se le ocurriera, a pesar del gran
problema que significaba para Él, la situación por la que Jerusalén estaba
pasando.
Nehemías, en vez de
contestarle seguido al rey cuando le preguntó qué cosa pediría, decidió orarle a
Dios.
Esa es la gran revelación
que Dios nos da en esta hora, para que no nos precipitemos ante las
circunstancias, favorables o desfavorables.
Hay que pornerlo
“TODO EN SUS MANOS”
Antes de nosotros decidir, vamos a
orar a Dios, vamos a ponernos en sus manos y si lo hacemos con fe sobrenatural,
veremos la gloria de Dios manifestarse en todas y cada una de nuestras
decisiones.
Sabemos que las cosas se tornan
difíciles, y que muchas veces nos encontramos en una especie de callejón sin
salida, pero si le entregamos todo a Dios, si ponemos nuestras batallas en sus
manos, el triunfo estará asegurado.
Si no conoces a Jesús, el tiempo
actual es propicio para que tomes la decisión más importante de tu vida, ven a
Cristo, sólo sé valiente !!!
Dios
te bendiga !!!
Héctor Paula.
Para la Gloria de
Dios
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