"EL CUIDADO DEL ALMA"

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LECTURA BÍBLICA DE HOY: Josué 23: 11,

“GUARDAD, PUES, CON DILIGENCIA VUESTRAS ALMAS, PARA QUE AMÉIS A JEHOVÁ VUESTRO DIOS”

Gracias mi Dios por tu Palabra. Gracias por el aire que respiramos. Gracias por tus maravillas, por todo lo que nos has dado. Gracias por las pruebas, porque sin ellas no crecemos. Glorifícate en la vida de los lectores y lectoras. Reprende toda fuerza de las tinieblas y háblanos en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** SERMÓN *** REFLEXIÓN:

Existe una gran preocupación por nuestro cuidado físico.

Diría que, actualmente la gran mayoría de las personas invierten mucho tiempo, recursos, dietas y dinero en mantenerse saludable y obviamente ejercitándose, ya sea en un gimnasio, practicando algún deporte, caminando y/o trotando.

Trabajé una vez en una empresa donde el dueño pagaba el gimnasio a todos sus funcionarios, porque él sabía que un empleado saludable le rinde mejor en sus labores tanto físicas como intelectuales.

Pero el cuerpo es solo una parte de nosotros y obviamente no podemos solamente cuidar esta parte, sino que no debemos descuidar los demás componentes, alma y espíritu, específicamente nuestra alma, “Y EL MISMO DIOS DE PAZ OS SANTIFIQUE POR COMPLETO; Y TODO VUESTRO SER, ESPÍRITU, ALMA Y CUERPO, SEA GUARDADO IRREPRENSIBLE PARA LA VENIDA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO”, 1ra. Tesalonicenses 5: 23.

El espíritu es pertenencia de Dios, porque es el soplo de vida que nos dio cuando fuimos creados, por tanto vamos a concentrarnos en lo relativo nuestra alma.

El alma no perece, es eterna, podemos verlo cuando Elías clamaba a Dios por el hijo muerto de la la viuda de Sarepta.

El alma de este niño ya había salido de él y Elías clamó: “Y SE TENDIÓ SOBRE EL NIÑO TRES VECES, Y CLAMO A JEHOVÁ Y DIJO: JEHOVÁ DIOS MÍO, TE RUEGO QUE HAGAS VOLVER EL ALMA DE ESTE NIÑO A ÉL”, 1 Reyes 17: 21.

Dios hizo el milagro de resucitarlo.

En medio de todo lo que estamos viendo en estos tiempos proféticos, Dios en su infinita misericordia nos está exhortando a que alimentemos nuestras almas a través del sacrificio de Jesús en la cruz, el cual derramó su Sangre preciosa para redención y salvación de nuestras almas.

Lamentablemente, la gran mayoría no está en eso, están como el hombre aquel que tenía tantos bienes que mandó a construir otro granero para acumular más y más, diciéndole a su alma que tenía mucho para muchos años, que reposara, que comiera, que bebiera, que se regocijara, “Y DIRÉ A MI ALMA: ALMA, MUCHOS BIENES TIENES GUARDADOS PARA MUCHOS AÑOS; REPÓSATE, COME, BEBE, REGOCÍJATE”, Lucas 12: 19.

Esto es un parecido a como está la gente hoy en día.

Pero lo que no sabía este hombre era que esa misma noche Dios lo mataría, “PERO DIOS LE DIJO: NECIO, ESTA NOCHE VIENEN A PEDIRTE TU ALMA; Y LO QUE HAS PROVISTO, ¿DE QUIÉN SERÁ?”, Lucas 12: 20.

Hermano, hermana, amigo, amiga que lees este mensaje, no descuides esta salvación que tenemos disponible en este tiempo de gracia.

Los acontecimientos mundiales nos dicen que Cristo está a las puertas de venir por segunda vez, y no viene con relación al pecado, viene a juicio.

Estamos a tiempo todavía

No basta solo con el cuidado del cuerpo. Dios nos está mandando a que procuremos

“EL CUIDADO DEL ALMA”

Sus misericordias son nuevas cada mañana, y tenemos que clamar, “VUÉLVETE, OH JEHOVÁ, LIBRA MI ALMA; SÁLVAME POR TU MISERICORDIA”, Salmos 6: 4.

En los momentos de angustia clama a Jehová, espera en Él, eso es lo importante, “¿POR QUÉ TE ABATES, OH ALMA MÍA, Y POR QUÉ TE TURBAS DENTRO DE MÍ? ESPERA EN DIOS; PORQUE AÚN HE DE ALABARLE, SALVACIÓN MÍA Y DIOS MÍO” Salmos 42: 5

No podemos retroceder para perdición, busca de Cristo para preservación del alma, “PERO NOSOTROS NO SOMOS DE LOS QUE RETROCEDEN PARA PERDICIÓN, SINO DE LOS QUE TIENEN FE PARA PRESERVACIÓN DEL ALMA”, Hebreos 10: 39.

Eres importante para Cristo, tienes una preciosa alma que salvar.

No descuides esta gran oportunidad de venir a los pies de Cristo.

Corre por tu salvación, ven a Cristo ahora, mañana puede ser tarde.

Dios te guarde,

HÉCTOR PAULA