LECTURA BÍBLICA DE HOY:
Isaías 53: 55, "MAS ÉL HERIDO FUE POR NUESTRAS REBELIONES, MOLIDO POR NUESTROS PECADOS; EL CASTIGO DE NUESTRA PAZ FUE SOBRE ÉL, Y POR SU LLAGA FUIMOS NOSOTROS CURADOS"
Gracias Dios mío por tu Palabra. Bendice los lectores y lectoras, líbralos de todo mal, llévate toda enfermedad, toda dolencia, todo infarto, toda trombosis, todo cáncer, todo malestar, todo accidente. Intercedo ahora por la salud de mis lectores, lectoras y por la mía también en el nombre poderoso de Jesús. Amén.
MENSAJE:
Las enfermedades se han multiplicado alarmantemente.
Hemos visto personas que aparentemente están bien de salud y de repente les da un infarto u otro evento inesperado y nos enteramos de que tal o cual persona falleció.
Existen muchas causas que nos pueden provocar enfermedades y/o accidentes que nos tocan a nosotros ó a algún familiar ó relacionado.
Esto no es nuevo, las enfermedades acompañan al hombre desde que Adán y Eva le fallaron a Dios. Obviamente Dios nos ha dado la cura más efectiva contra toda enfermedad y su nombre es Jesucristo.
Ya el el profeta Isaías lo decía como un cumplimiento a través del tiempo y el espacio, dándonos a los cristianos el fundamento de que Cristo sana.
Por Jesús somos
"CURADOS POR GRACIA"
Y la Palabra es clara, Isaías 53: 55, "MAS ÉL HERIDO FUE POR NUESTRAS REBELIONES, MOLIDO POR NUESTROS PECADOS; EL CASTIGO DE NUESTRA PAZ FUE SOBRE ÉL, Y POR SU LLAGA FUIMOS NOSOTROS CURADOS"
Por la llaga de Jesús hemos sido curados,
Él tomó nuestras enfermedades y llevó nuestras dolencias, "PARA QUE SE CUMPLIESE LO DICHO POR EL PROFETA ISAÍAS, CUANDO DIJO: ÉL MISMO TOMÓ NUESTRAS ENFERMEDADES, Y LLEVÓ NUESTRAS DOLENCIAS", Mateo 8: 17.
El centurión lo entendió así, y cuando su criado se enfermó, el centurión tenía su fe en que Jesús lo sanaría, Mateo lo explica muy bien, "Y JESÚS LE DIJO: YO IRÉ Y LE SANARÉ. RESPONDIÓ EL CENTURIÓN Y DIJO: SEÑOR, NO SOY DIGNO DE QUE ENTRES BAJO MI TECHO; SOLAMENTE DÍ LA PALABRA, Y MI CRIADO SANARÁ", Mateo 8: 7-8
En esta hora Dios quiere que tú y yo entendamos estas promesas, y que el mismo Jesús que sanó al criado del centurión, es el mismo Jesús que quiere actuar sobre tu dolencia, sobre tu enfermedad.
Siempre he dicho que no es que hay muchas enfermedades, lo que hay es poca fe.
Aún cuando Lázaro había muerto y ya tenía cuatro días en el sepulcro, Marta no quería quitar la piedra que Jesús le dijo que quitara, porque ella dudaba que Lázaro podría resucitar.
Pero el Maestro tuvo que hablarle con autoridad, "JESÚS LE DIJO: ¿NO TE HE DICHO QUE SI CREES, VERÁS LA GLORIA DE DIOS?", Juan 11: 40.
Vamos a pedir la fe sobrenatural de Dios, para poder actuar sobre las enfermedades. Jesús nos dio la autoridad, pero es con fe que lo lograremos.
Los cristianos hemos sido revestidos de la autoridad para poner las manos sobre los enfermos y ellos sanarán en el nombre de Jesús, "Y ESTAS SEÑALES SEGUIRÁN A LOS QUE CREEN: EN MI NOMBRE ECHARÁN FUERA DEMONIOS; HABLARÁN NUEVAS LENGUAS; TOMARÁN EN LAS MANOS SERPIENTES, Y SI BEBIEREN COSA MORTÍFERA, NO LES HARÁ DAÑO; SOBRE LOS ENFERMOS PONDRÁN LAS MANOS, Y SANARÁN", Marcos 16: 17-18.
Vamos a creerle a Dios. Vamos a ejercer la autoridad que nos ha dado sobre las enfermedades.
Podría relatarles aquí muchos testimonios de cómo Dios ha sanado a personas sobre las cuales he puesto mis manos, no habría espacio para darle todos esos testimonios. Lo que sí les puedo decir que Dios es real y que Cristo sana.
Ven a Cristo para que puedas tener esa autoridad.
Jesús te ama y te llama !!!
Corre a Él !!!
Dios te bendiga,
Héctor Paula
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