LECTURA BÍBLICA DE HOY:
1ra. Juan 2: 1, "HIJITOS MÍOS, ESTAS COSAS OS ESCRIBO PARA QUE NO PEQUÉIS; SI ALGUNO HUBIERE PECADO, ABOGADO TENEMOS PARA CON EL PADRE, A JESUCRISTO JUSTO"
Gracias Dios mío por tu Palabra Santa y Perfecta. Te pedimos sabiduría de lo alto, guíanos a puerto seguro dentro de este mundo de incertidumbres, ilumina nuestros caminos con la luz de Cristo, no permitas que ninguno de nosotros nos perdamos, en el nombre de Jesús. Amén.
MENSAJE:
El ejercicio de la abogacía tiene varias vertientes, unos la realizan con honorabilidad, otros con malicia y otros que se venden al mejor postor, sin importar que traicionen al que primero los contrató.
Obviamente un abogado posee herramientas fulminantes para ganar su caso.
Conocí un abogado que le llevaban los casos que nadie quería tomar, porque eran casos imposibles de ganar, pero este abogado los tomaba y no perdía uno, debido al manejo que le imprimía a cada caso y a sus destrezas profesionales.
Es indiscutible e innegable
"EL PODER DEL ABOGADO"
Ahí vemos los casos a diario, personas que infringen la ley han sido apresados y el abogado los defiende para obtener la ganancia del caso y su libertad.
Dios ha tenido en cuenta que los cristianos necesitábamos un abogado que nos defendiera ante el Padre Celestial de las acusaciones del gran acusador, el enemigo de las almas.
Lo vimos acusando a Job delante de Jehová. Porque uno de los objetivos principales del enemigo de las almas es acusarnos, por eso es que es tan peligroso estar acusando, no podemos ejercer la acusación contra nadie, no debemos de estar acabando con los hermanos, porque le estamos haciendo el juego al diablo.
Él no descansa, no duerme en su afán por acusarnos y anda por la tierra, merodeando para ver a quien acusa, "Y DIJO JEHOVÁ A SATANÁS: ¿DE DÓNDE VIENES? RESPONDIENDO SATANÁS A JEHOVÁ, DIJO: DE RODEAR LA TIERRA Y DE ANDAR POR ELLA", Job 1: 7.
Vamos a ponernos a cuentas con Dios, si le fallamos, vamos a humillarnos y a arrepentirnos de corazón, para que nuestro abogado, Jesucristo nos pueda defender ante el Padre de las acusaciones del maligno.
Vamos a tratar de no pecar, pero si pecamos y nos arrepentimos tenemos promesa de nuestro abogado, "HIJITOS MÍOS, ESTAS COSAS OS ESCRIBO PARA QUE NO PEQUÉIS; SI ALGUNO HUBIERE PECADO, ABOGADO TENEMOS PARA CON EL PADRE, A JESUCRISTO JUSTO", 1ra. Juan 2: 1.
El tiempo se termina, el círculo se cierra, el tiempo de la Gracia se agota, la final trompeta está a punto de sonar, y sólo se oirá el clamor, "ahí viene el esposo".
La iglesia está a punto de ser arrebatada al cielo, y los muertos en Cristo resucitarán primero, y luego nosotros seremos arrebatados al cielo, es la gran promesa que tenemos a los que esperamos con vivo celo a nuestro Señor Jesucristo.
Jesús es nuestro abogado justo en el cielo, esa es mi fe.
Si no lo conoces, ven pronto, porque luego será tarde, ven a disfrutar del gozo de la salvación !!!
Dios te bendiga !!!
Héctor Paula
Para la Gloria de Dios
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