"LA HUMILDAD NO TIENE PRECIO"

LECTURA BÍBLICA DE HOY:

Filipenses 2: 3, "NADA HAGÁIS POR CONTIENDA O POR VANAGLORIA; ANTES BIEN CON HUMILDAD, ESTIMANDO CADA UNO A LOS DEMÁS COMO SUPERIORES A ÉL MISMO"

Gracias Dios mío por tu Palabra. Te presento los lectores y lectoras, llévate toda depresión, todo espíritu de violencia lo ato en esta hora, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE :

La humildad es uno de los más extraordinarios dones que Dios le otorga al ser humano, vamos a estar claros, es un don, la humildad no se compra en farmacia, la da Dios.

Obviamente la humildad brilla por su ausencia en la gran mayoría de las personas, sobre todo en estos tiempos de tantos avances tecnológicos, científicos y de las redes sociales.

Cuando usted encuentra a una persona humilde en su trabajo, en su centro de estudios, o donde sea, esa persona se destaca y se le ve con gran respeto y admiración, porque las personas humildes escasean.

Y quiero resaltar que no me refiero al humilde con relación al dinero, sino con relación al espíritu.

La arrogancia, el orgullo, la vanagloria de la vida, han permeado en todos los ámbitos de las sociedades, obteniendo como resultado personas muy duras de corazón.

Dios nos está ordenando a que tomemos la humildad que Él nos ofrece y que también nosotros tenemos que pedírsela.

Es hermoso ser humilde de espíritu, es lo que Dios nos enseña.

Es por eso que

"LA HUMILDAD NO TIENE PRECIO"

Es incalculable el precio de la humildad.

Dios está buscando hombres y mujeres que estén dispuestos a ser humildes, así como Pablo pasó de la arrogancia a la humildad.

Jesús nos enseñó siempre la humildad, al extremo de que entró a Jerusalén en un burro.

Hay que extirpar la arrogancia, la soberbia y buscar la humildad de Cristo, para que podamos tener la Gracia de Dios, no lo digo yo, "PERO ÉL DA MAYOR GRACIA. POR ESTO DICE: DIOS RESISTE A LOS SOBERBIOS, Y DA GRACIA A LOS HUMILDES", Santiago 4: 6.

Si quieres ver la Gloria de Dios en tu vida cristiana, en tu Ministerio, sé más humilde cada día.

El evangelio de Jesucristo es la única institución en que las personas crecen hacia abajo, osea, mientras más humildes, más cercano se llega al Trono de la Gracia.

No podemos hacer nada por contienda ó por vanagloria, sino con humildad, vamos a estimar a los demás como superiores a nosotros,

"NADA HAGÁIS POR CONTIENDA O POR VANAGLORIA; ANTES BIEN CON HUMILDAD, ESTIMANDO CADA UNO A LOS DEMÁS COMO SUPERIORES A ÉL MISMO", Filipenses 2: 3.

En Cristo vas a conocer la verdadera humildad.

La humildad no tiene precio, ven a Cristo si no lo conoces y Él te sellará con la humildad del Espíritu Santo de Dios.

Jesús te ama y te llama.

No lo rechaces.

Ven a Él !!!

Dios te bendiga !!!

Héctor Paula

Para la Gloria de Dios