miércoles, 7 de septiembre de 2011

"DEBAJO DE LOS ESCOMBROS"


Foto por: taringa.net

LECTURA BÍBLICA DE HOY: Isaías 42: 7,

PARA QUE ABRAS LOS OJOS DE LOS CIEGOS, PARA QUE SAQUES DE LA CÁRCEL A LOS PRESOS, Y DE CASAS DE PRISIÓN A LOS QUE MORAN EN TINIEBLAS”.

Gracias por tu palabra Dios mío, ellas son las que nos conducen al conocimiento de la verdad, gracias por tu misericordia, bendice a los lectores y háblanos en el siguiente mensaje, en el nombre de Jesús. Amén.

MENSAJE *** EXHORTACIÓN *** SERMÓN *** REFLEXIÓN:

Cuando leo este versículo me acuerdo inmediatamente de lo que era mi vida antes de conocer a Cristo.

Era un ciego espiritual, me quería llevar el mundo por delante, era un preso de varias cárceles, como son las mujeres, las fiestas, los bonches, la música, los placeres, etc.

Además vivía en casas de prisión de tinieblas visitando parasicólogas (brujas de cuello blanco), siendo adicto a los cuarzos, etc.

Me encontraba exactamente debajo de los escombros, así como cuando pasan los terremotos que se caen los edificios y quedan personas debajo de los escombros, así mismo yo me encontraba espiritualmente hablando.

Pero un día, un maravilloso día, Dios me llamó dramáticamente al redil de Cristo, levanté mi mano en la Iglesia Hechos 4: 12, en aquel glorioso 18 de agosto del año 2000, y ese hombre profeta de Dios llamado José Colón, el vaso que Dios eligió para que escuchara su voz, oró por mi y desde ese día hice un pacto con Dios, y no cambio este evangelio de Jesucristo por todo el oro del mundo.

A pesar de todas la batallas, de todos los problemas, de todas las dificultades amo a mi Cristo porque me lavó con su Sangre preciosa y libra todas mis batallas.

Tengo debilidades y fortalezas, le oro a Cristo para perseverar en mis fortalezas y que Él me ayude a mejorar mis debilidades.

Este es el Cristo que te presento en esta hora, el Cristo que ya había sido profetizado para abrir los ojos a los ciegos espirituales, para sacar a los presos de las cárceles de los placeres del mundo y de las prisiones a los que moran en tinieblas, “PARA QUE ABRAS LOS OJOS DE LOS CIEGOS, PARA QUE SAQUES DE LA CÁRCEL A LOS PRESOS, Y DE CASAS DE PRISIÓN A LOS QUE MORAN EN TINIEBLAS”, Isaías 42: 7.

Cristo murió por ti y por mí en una horrenda cruz para poder sacarnos del lodo senagoso del mundo, tú tienes la gran oportunidad que yo tuve.

Nunca te fijes en los defectos de un cristiano, solo pon tu mirada en Cristo, eres importante para Él.

El enemigo de las almas se enoja si tomas la decisión de convertirte a Cristo, pero tienes que hacerte valiente y dar lugar al llamado que Jesús te hace en esta hora.

Cristo llama a la puerta de tu corazón, para entrar y cenar contigo, mira que sublime promesa, “HE AQUÍ, YO ESTOY A LA PUERTA Y LLAMO; SI ALGUNO OYE MI VOZ Y ABRE LA PUERTA, ENTRARÉ A ÉL, Y CENARÉ CON ÉL, Y ÉL CONMIGO”, Apocalipsis 3: 20.

Las cosas están duras y peligrosas.

Ya nadie está seguro, ni aún en su propia casa.

Las noticias son impactantes.

El acontecer mundial es desalentador, es incierto.

Tus cargas y mis cargas son fuertes.

A veces queremos tirar la toalla, como decimos en mi país, pero Jesús está pendiente de nosotros y quiere llevar nuestras cargas.

Otras veces te sientes trabajado, trabajada, pues déjame decirte que Cristo quiere hacer menos pesada tu carga, mi carga, “VENID A MÍ TODOS LOS QUE ESTÁIS TRABAJADOS Y CARGADOS, Y YO OS HARÉ DESCANSAR”, Mateo 11: 28.

Estar sin Cristo es lo mismo que estar,

DEBAJO DE LOS ESCOMBROS

Debajo de los escombros de la hipocresía del mundo, debajo de los escombros de los intereses, de la discriminación, de la traición, del odio, del rencor, de la maldad.

Cristo nos saca de esos escombros y te trae a su luz admirable, haciendo de ti y de mí linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, “MAS VOSOTROS SOIS LINAJE ESCOGIDO, REAL SACERDOCIO, NACIÓN SANTA, PUEBLO ADQUIRIDO POR DIOS, PARA QUE ANUNCIÉIS LAS VIRTUDES DE AQUEL QUE OS LLAMÓ DE LAS TINIEBLAS A SU LUZ ADMIRABLE”, 1ra. Pedro 2: 9.

Cristo te ama y te llama,

Ven a Él,

Dios te guarde,

Héctor Paula

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